Antioquia un lugar maravilloso

Antioquia, tierra mágica y generosa ubicada estratégicamente en la esquina nor-occidental suramericana, llena de historias asombrosas y gente admirable.

martes, 31 de julio de 2012

TEORÍAS SOBRE EL ORIGEN DEL NOMBRE ANTIOQUIA

Referencias al nombre de Antioquia se pueden encontrar en distintos lugares del mundo y escritas con varias grafías: Antiochia, Antioch, Atocha, Antiokia, Antioquia, Antioquía, Antiochia, Antiocheia, Antiochea, Antiokheia, entre otros. 

La región más antigua que se conoce con este nombre es la actual provincia Turca fundada por la dinastía helénica, en particular, tomada de sus gobernantes Antioko I, II y III. Los actuales turcos llamaron a esta región Antakya y los griegos la llamaron Αντιόχεια.

Pero ¿por qué ponerle el nombre Antioquia a un lugar en el equinoccio americano, sitios tan separados el uno del otro y sin ninguna aparente relación? Para responder a esta pregunta, primero habría que reconocer que muy pocas cosas suceden sin estar conectadas o vinculadas, por lo cual el nombre de Antioquia tiene correspondencia con una tradición que nos viene de España, siendo los españoles los que oficialmente aparecen como los autores del nombre.

Sin embargo, a continuación intentaremos nombrar las diferentes teorías que el nombre de Antioquia ha tenido a lo largo de su historia, comenzando con la más lógica, razonable y aceptada, la que demuestra que esta denominación fue producto de la mentalidad católica implantada por los españoles en el Nuevo Mundo, hasta explicar algunas de las más fantásticas historias que este nombre ha inspirado.

La ciudad de Antioquia fue fundada por el Mariscal Jorge Robledo, un hidalgo andaluz enrolado en las huestes de conquista y coloniazacion españolas que penetraron Suramérica hasta su corazón en el Perú. Robledo fundó en las tierras de los ebéjicos, situado al sur de la población de peque, el 4 de diciembre de 1541, la ciudad de Santa Fe de Antiochia.

Como se puede observar, los europeos de aquella época tenían un especial arraigo en el catolicismo y participaron en la propagación de la Fe en toda la orbis terrarum; por ello, cada fundación tenía un especial ritual de consagrarla a la advocación mariana o santo patrono al cual eran fieles sus fundadores. Del mismo modo, el nombre de Antioquia pudo haber sido empleado por la tradición de bautizar las tierras donde se establecieron en América empleando el santoral, o para mejor decir, las efemérides de los santos y vírgenes del día en que se quería bautizar el lugar.

En nuestro caso se trataría de la virgen de Atocha o Antiochia, que entró a la Península ibérica a través de los primeros cristianos, de la cual aún se conserva la figura o imagen de origen bizantino que ha sido muy venerada desde su entrada a Europa. Esto nos indica que el mariscal Robledo o alguno de sus acompañantes eran devotos seguidores de esta advocación mariana.

Por otro lado, Antiokia en Turkia fue la cuna del cristianismo y donde nacieron los primeros Papas de la civilización cristiana, los que expandieron esta creencia por el Viejo Continente. De manera que no es difícil deducir que la razón del nombre de Antioquia a las tierras de Nutabes, Katios y Ebejicos, entre otros, fue producto de la mentalidad católica de los españoles y su devoción hacia la cuna de la cristiandad y sus representantes católicos, como papas, mártires y vírgenes de aquella procedencia.

Parafraseando al intelectual antioqueño Luis López de Mesa indicó que los antiguos fundadores de pueblos españoles le habían colocado este nombre a la región andina porque creían que, así como los primeros cristianos salieron de la Antioquía turca para expandir el cristianismo entre los paganos greco-romanos, desde la nueva Antioquia, la americana, se propagaría la nueva Fe por todo el Nuevo Mundo. 

Existen también otras teorías que no son del todo desdeñables y que es bueno conocerlas pues han suscitado algún interés en determinada época, que pasan desde historias fantásticas a otras más moderadas. La primera de estas es sobre que el nombre de Antiokia se debe a una palabra autóctona o un topónimo que se encontraba en esta zona, que era también uno de los sistemas empleados por los europeos para refundar ciudades, villas y sitios sobre poblados indígenas que ya estaban consolidados. 

Una de aquellas teorías nos habla de la presencia de europeos que arribaron a América antes de Cristóbal Colón, quienes venían en busca de oro y plata, por ejemplo entre ellos se han dilucidado teorías sobre la llegada al continente de templarios, quienes habrían venido con armenios y caucásicos. Vale la pena mencionar que en la región son topónimos reconocidos como netamente precolombinos (antes de la llegada de los españoles) las voces de: Caucasia, Cauca, Armenia y Antioquia, entre otros.

También se cuenta con la teoría que relaciona a Antioquia con los vascos, tanto la hipótesis expuesta por don Tulio Ospina que hablaba sobre los orígenes de los habitantes indígenas de Antioquia. Afirmaba este intelectual antioqueño que para el momento en que llegaron los españoles al territorio, se encontraba poblado por los llamados por él “alófilos”, cuya terminología se emplea para designar como “de otro lado”. Según esta teoría los vascos tenían especial conexión con este grupo en Antioquia, quizás en referencia a que el euskera ha sido considerado como una lengua alófila, es decir, aislada y por lo tanto sus habitantes se consideren de igual condición.

Pero la versión vasca cuenta con más credibilidad no en la teoría de Ospina, sino en el hecho de que entre los primeros inmigrantes europeos que se establecieron en territorio actual antioqueño, habían un número bastante grande de “vizcaínos” o vascos contratados por ser hábiles navegantes, muy trabajadores y arrojados militares. Fueron estos vizcaínos los que fundaron ciudades como Santamaría la Antigua del Darién, San Sebastián de Uraba, Vitoria y Remedios, quizás entre ellas se encontraba los fundadores de Antioquia. La relación nos llega por medio de la voz vasca “antzokia” que aunque literalmente hoy traduce “teatro”, puede tener alguna semejanza o etimología de origen vasco.

A su vez, la relación vasca también nos llega por medio de uno de los vascos universales Iñigo Loyolako, más conocido como San Ignacio de Loyola, quien cambio su nombre euskaro Iñigo, por el latino Ignacio o Ignatius, en honor a san Ignacio de Antioquia, uno de los primeros mártires del catolicismo romano. Por ello, es posible que la vos Antiochia, Antioquia o Antiokia estuviera muy ligada dentro de este colectivo.

Lo que sí es seguro es que se encuentran en el resto de la Península ibérica referencias al nombre de Antioquia, por ejemplo, se recuerdan las muchas localidades que en España han tomado el nombre de Atocha. Entre ellas, la Basílica de Nuestra Señora de Atocha que se encuentra Madrid y la localidad madrileña llamada Atocha. En San Sebastián, se encuentra el estadio de la Real Sociedad que se llama Estadio Municipal de Atocha (Atotxako futbol zelaia).

Pero no sólo en la península y en el mundo católico mediterráneo se encuentran referencias a Antioquia, en otros lugares americanos también las podemos encontrar, por ejemplo, en Méjico, se puede visitar el santuario del Niño de Atocha, el cual derivó, según se cuenta de la figura traída a la aldea de Fresnillo en Zacatecas por los españoles en 1554.

Más aún, si en el mundo hispanoamericano se tienen noticias relacionadas con el nombre Antioquia, en la órbita anglosajona se pueden encontrar alegorías a esta palabra. Al respecto, en el Estado de California, en los Estados Unidos existe una ciudad llamada Antioch, una de las más antiguas fundadas en California por grupos de colonos antes de la fiebre del oro. Se cree que le pusieron Antioch dado su filiación a la religión protestante, lo que prueba que la provincia de Antiokia en la actual Turquía es referenciada como uno de los lugares sagrados para el cristianismo.  



LA JUNTA DE GOBIERNO EN 1810 Y EL PROYECTO DEL ESTADO DE ANTIOQUIA.



El mes de agosto fue donde se desarrollaron los sucesos más relevantes de la sociedad antioqueña frente al llamado de la península a formar juntas de gobierno en todas las ciudades principales americanas y sus adscripciones territoriales.
El día 4 el gobernador de Antioquia ante las autoridades de la administración española Francisco de Ayala, realizó una proclama dirigida al pueblo antioqueño, en la que exponía sus inquietudes sobre la invasión napoleónica a la península.
Para el día 10 se comenzaron a invitar a los principales cabildos de Antioquia para establecer un congreso en Antioquia, donde se trataran estos delicados temas. Finalmente el día 30 se logró establecer la Junta de Gobierno de Antioquia dispuesta de la siguiente manera: su presidente fue Francisco de Ayala, Elías López Tagle fue designado como vicepresidente y José Manuel Restrepo como secretario. 
Fue una junta que aglutino a todas los territorios antioqueños en una Junta Provincial única, manteniendo el carácter consensuado para evitar el resquebrajamiento de la unidad política y soberanía sobre los gobiernos locales, las ciudades y las villas.
La junta de Antioquia apoyó la iniciativa de Cartagena que consistía en reunirse en Medellín y formar una alianza federativa, a lo cual la Junta de Antioquia afirmaba, su voluntad de unirse pero sin poner en duda el rango y vasallaje a la autoridad real que representaba Fernando VII.
Antioquia y las demás provincias se guiaron para crear sus proyectos autonómicos en la figura “vacatio regio”, que significaba que ante la ausencia del rey la soberanía recaía sobre el pueblo, cortando todos los lazos que la unían con la administración colonial, sus instituciones y sus centros de poder.
Cada provincia podía autogobernarse sin ninguna sujeción a las autoridades virreinales, que era una merced o gracia otorgada por el rey para su administración, recaía la soberanía sobre la forma más antigua jurídico-territorial primigenia que era la ciudad y sus adscripciones territoriales.
Por esta razón desconocieron la centralidad de Santafé y se dieron a la tarea de crear una libre y voluntaria unión entre territorios iguales, que en fechas posteriores se consolidó como una confederación de Estados libremente asociados.

domingo, 29 de julio de 2012

LA PRIMERA DICTADURA DE AMÉRICA LATINA OCURRIÓ EN ANTIOQUIA EN 1813


Después de culminadas las guerras de independencia de América Latina y una vez desmembrado el Estado o Imperio Español, resultaron como consecuencia una serie de países producto de una guerra civil que se prolongó hasta 1826.
Desde entonces, en la América hispana pocos países han estado al margen en algún momento de su vida republicana de pugnas caudillistas, de gobiernos militares, de regímenes populista o dictatoriales y de golpes de estado. 
Las dictaduras americanas tienen su ejemplo primigenio en el Estado Soberano de Antioquia, pero a diferencia de las dictaduras latinoamericanas, la de Antioquia se caracterizó por el carácter consensuado, moderado y pragmático de esta experiencia política antioqueña.
Estamos hablando de año de 1813 cuando los representantes de los principales cabildos antioqueños nombraron a Juan del Corral, como dictador del Estado de Antioquia. El objeto de esta particular forma de gobierno que se presentó en Antioquia, era el de poseer un gobierno militar que potenciara el aparato militar para así salvaguardar la vida y bienes de los habitantes de Antioquia, y defender su constitución del avance e injerencia de territorios externos y del enemigo común que representaban las tropas leales a Fernando VII.
Por esta razón los representantes antioqueños solicitaron la suspensión de la constitución antioqueña, y encargar de la particular y delicada forma de gobierno a Juan del Corral -nacido en Mompóx y radicado en Antioquia-, el cual prestó grandes servicios a Antioquia y se llegó a convertir en su presidente dictador.
Pasados tres meses el dictador de Antioquia entregó un informe detallado sobre su periodo de gobierno, siendo prorrogado su mandato por cuatro meses más. Hasta inicios de 1814 en que entregó el mandato a un presidente civil para que gobernara el Estado Soberano de Antioquia.
Durante el mandato de Juan del Corral se decretó la separación definitiva de Antioquia de la administración colonial, mediante el acta de Independencia del Estado Soberano de Antioquia; se dictaron importantes leyes para el beneficio de sus habitantes y se estableció una fuerza militar de considerable importancia que defendiera la constitución antioqueña y a los habitantes de su territorio.
Por todo esto, la primera dictadura que se instauró en América, se hizo en el Estado de Antioquia, en una época donde la soberanía popular recayó sobre los habitantes de sus comarcas y que estuvieron dispuestos a defender por las armas su constitución, sus familias y su patria, un estado soberano y libre en la América meridional.